La Región Administrativa y de Planificación Especial (RAPE) Región Central es una figura asociativa del ordenamiento territorial, conformada por cinco entidades territoriales: Bogotá, Cundinamarca, Boyacá, Meta y Tolima. El propósito es “integrar y consolidar, desde lo regional, un territorio de paz, con equilibrio social, económico y ambiental, culturalmente diverso y globalmente competitivo e innovador”. Constituye un nuevo marco institucional para la planificación a escala regional, para enfrentar la fragmentación de su territorio, infraestructuras y mercados, a través de dinámicas de complementariedad funcional entre sus asociados, articulación y coordinación de políticas públicas y proyectos supraterritoriales, logrando con ello, mayor desarrollo humano y bienestar de sus habitantes.
La consolidación de la Región Central va más allá de ser un ejercicio de planificación, para posicionarse como un apuesta por el desarrollo sostenible, con actuaciones estratégicas como la reconversión agroindustrial, la gestión del recurso hídrico, la mitigación del cambio climático y la adopción de estrategias para gestionar el riesgo, la puesta en marcha de un sistema de transporte multimodal que favorezca la integración de los centros de producción con los polos de comercialización y consumo y la promoción de la innovación y el desarrollo en todos los procesos productivos regionales, entre otras.
Para el logro de estos propósitos, se han concertado cinco líneas estratégicas sobre las cuales proyectar el desarrollo durante los próximos años: 1.Sustentabilidad ecosistémica y manejo de riesgos. 2. Seguridad alimentaria y economía rural. 3. Infraestructuras de transporte, logística y servicios públicos. 4. Competitividad y proyección internacional. 5. Gobernanza y buen gobierno.
• Disminuir brechas territoriales en materia de competitividad, desarrollo económico, bienestar y calidad de vida.
• Promover un marco de planificación, mejorar la gestión y la inversión regional.
• Superar el enfoque sectorial de la política nacional y generar condiciones para desarrollo a nivel regional en las cinco líneas estratégicas.
• Integrar los planes de desarrollo, identificar complementariedades de políticas y concurrencia de fuentes de financiación sobre resultados con mayor eficiencia y eficacia.
• Generar medidas de ajuste normativo, acompañada de delegación de competencias y sistema de incentivos.